3 feb 2013

Una duda...



Si realizas una acción errónea, si no ayudas a alguien que con maldad y/o inconsciencia no te ayudó cuando más lo necesitabas; si no lo haces y, si existiera un ente superior por encima de nuestras cabezas, le haría una pregunta: ¿Me podrías perdonar?. O, inclusive, algo más importante....

¿PODRÍA PERDONARME YO?

No resulta fácil decir "no" cuando tienes la facilidad de hacer algo que alguien te pide, si de verdad esa persona te necesita (aunque no te especifique que te requiera). De todas formas una de las idiosincrasias de la "ayuda" al prójimo es hacerlo sin pedir nada a cambio, por tu propia recompensa personal (que no es poca cosa, la verdad).

Al cabo de los años te vas "quemando", podría decir que desilusión es la palabra.
Sí, la conciencia queda limpia y tranquila, pero tu orgullo... se hiere cada vez más, y por ello todo comienza a dolerte, sin razón aparente, acciones que antes pasaban sin rozarte, ahora son alfileres que duelen.

Nunca los he puesto a ambos en una balanza. 
No sé hasta qué punto una cosa es más positiva que la otra.

8 ene 2013

-Monólogo-


Escribir...
Para mi este verbo es sinónimo de desprender, sí, lo digo bien.
Cada vez que hago "intento" de escritura algo de mí se va en ella, sin irse del todo.
Así soy libre de decir lo que siento, lo que pienso y lo que hago... aunque no completamente.
Incluso en algo tan íntimo no lo expongo todo.

Miedo...
Miedo a enseñar todo lo que conozco de mi y que no me guste lo que leo.
Soy lo que muestro y lo que no muestro, todos lo somos.
¿Nos interesa conocernos?
¿Nos gusta lo que vemos?-supongo que a veces sí y otras no-

No siempre sé lo que soy, no siempre quiero saberlo.

Escribo para hablar, para hablarme a mi.
Mi mente deja parte de sus miedos y casi podemos hablar de tu a tu.
Y escribo para hablar de muchas personas, de sus mentalidades, sensaciones, emociones.
¿Alguna vez habéis intentado mirar la vida desde otra perspectiva diferente a la propia?
Yo sí... casi nunca me gusta lo que veo (será que me veo reflejada, en el fondo somos..tan parecidos).
Ese reflejo es el que me aterroriza.
Tenemos una visión de nosotros mismos que no siempre es correcta.
Nos idealizamos sobremanera, cuál Narciso reflejado en el río consumiéndose lentamente, sin mirar más allá de su reflejo.
Ese es mi miedo (hay más miedos, pero para que extenderme...).
Los miedos existen en nuestra mente, nada es tan peligrosa como la mente humana.
La inteligencia... (yo me rio de esa palabra). Que pocas personas la tienen, y que peligrosa puede llegar a ser.

Y así hilo pensamientos.
Casi nunca digo lo que realmente quiero decir.
Palabras que no me salen ni escritas, sobre todo sentimientos y emociones que no salen por un pánico atroz.
Miedo al rechazo, a la mediocridad, a no saber estar a la altura.
(Algún día quizás, me haré la valiente...)



γνῶθι σεαυτόν